¿Para qué escribo? Para contar mi historia, una más entre tantas historias de madres, pero no una cualquiera porque es la que me toca. Para contactar madres o padres de la blogósfera, cual botella al mar. Para mantener mi escritura activa. Para registrar momentos mientras mis chiquitos crecen vertiginosamente rápido.

lunes, 27 de marzo de 2017

Mi biblioteca de maternidad

Amo leer. Fui lectora desde mucho antes de ser madre. Y lo seguiré siendo toda mi vida.

Desde el día en que supe que estaba embarazada de Dani  decidimos buscar el primer embarazo, me puse a leer todo lo que cayó entre mis manos acerca del tema. Acerca del embarazo, la maternidad, la crianza de niños, la lactancia o temas más particulares, como las técnicas para masajear un bebé, el yoga en el embarazo o recetas de cocina para bebés y niños. Algunos libros me los compré, otros me los regalaron. Muchos quedaron olvidados en los avatares de la maternidad real. La mayoría los regalé o los vendí antes de mi segundo embarazo, porque no me pareció que ameritaran una segunda lectura. Sin embargo, algunos pocos los conservo todavía en mi biblioteca, ya sea porque me siguen resultando útiles (son los menos), porque le pueden servir a alguna persona querida en un futuro cercano, o bien porque les tengo cariño por lo que significaron en su momento. Aquí comparto algunos de los libros que me ayudaron, de una u otra forma, en los años que llevo siendo mamá.

Larousse del Embarazo: Me compré este bodoque de quichicientos veintinosecuántos kilos la misma semana en la que hicimos nuestra consulta prenatal (pasarían varios meses hasta que el test de embarazo diera positivo). Es un compendio muy extenso y completo sobre la concepción, el embarazo, todo lo que te espera en cuanto síntomas y demás, y el primer año del bebé (estadía en la maternidad en adelante). También hay capítulos sobre la visión del padre. Más allá de que descreo del futuro de las enciclopedias en papel, esta la voy a guardar toda la vida ya que las páginas de atrás venían en blanco para que una registrara su diario de embarazo, y así lo hice con Dani, semana a semana. Un recuerdo que atesoraré toda la vida.
Yoga, embarazo y plenitud, de David Lifar: Me lo regaló una compañera de trabajo cuando le conté que estaba haciendo yoga para embarazadas. Es un librito ameno y sencillo, ideal para acompañarte en la práctica (pero que obviamente no suple las clases de yoga).

Voices from the woumb,de Einat L.K:  No encontré traducción. Es un librito que me bajé gratis para leer en el Kindle cuando estaba embarazada de Quiqui, en parte porque sentía algo de culpa por ese segundo embarazo que me estaba pasando casi desapercibido. Es un librito de esos del embarazo semana a semana, con la particularidad de que está narrado por el propio bebé. Me ayudaba a reconectarme un poco con esa vida que crecía en mi interior y a la que le dediqué mucho menos lecturas que a la de su hermana mayor.

La maternidad y el encuentro con la propia sombra, de Laura Gutman: Me pasa algo raro con este libro. Me peleo constantemente con la autora, algunas de sus ideas me parecen neomachistas, como que el bebé debe vivir "atado" al cuerpo de su madre durante por lo menos 9 meses más (¿y el trabajo? ¿Y el sexo? ¿Y las salidas al cine? ¿Todo puede esperar? ¿Por cuánto tiempo? ¿Y la depresión postparto?). Solo se puede seguir su doctrina si sos una mujer de clase alta que se puede permitir estar sin trabajar. Y sin embargo... algunas de las cosas que dice en este libro me quedaron resonando. Como esas sesiones de terapia que te pegan unos días después. Por algo no lo tiré, qué sé yo.

Guía (inútil) para madres primerizas, 1 y 2, de Ingrid Beck y Paula Rodríguez: Dos manuales antiayuda que se toman la maternidad con soda (o con jugo de limón, por lo ácidas). Y es que son libros que no pretenden resolver ninguno de tus dilemas, más que uno: saber qué contestarle a cualquiera que venga con consejitos, planteos, críticas o interrogatorios a tu manera de ser madre. Para vivir la experiencia con un poco de humor y sentirse menos sola en la angustia del puerperio o en los avatares de la crianza.


El sueño del bebé sin lágrimas, de Elizabeth Pantley: Este SÍ que me ayudó, me dio respuestas y hasta me sugirió cosas que pude poner en práctica. Esta autora brinda consejos, tácticas, estrategias y soluciones para ayudar a tus bebés a dormir más y mejor (y, por ende, descansar también nosotras). Yo, que no quise saber nada con Estivill y su método de dejar llorar a los chicos, pero que tampoco me resigné con Rosa Jove a que se me instalen en la cama y que duerman colgados de mi teta hasta los dos o tres años, encontré en este libro un equilibrio espectacular, porque no propone una solución mágica sino que da un repertorio variado donde cada una elige lo que mejor se adapte a la familia que le tocó. De la misma autora leí también uno específico sobre siestas y otro sobre el sueño del bebé recién nacido, que NO, no lo ayuda a dormir de corrido porque eso no es posible, pero sí te ayuda a entenderlo mejor y a que ese tiempo se haga más llevadero.

¿Conocían alguno de los libros de mi lista? ¿Leyeron / están leyendo algún libro sobre maternidad? ¿Cuál me recomendarían?

2 comentarios:

  1. Ay, llevo como dos horas revisando tu blog. Me gusta mucho, creo que tenemos perspectivas similares sobre muchas cosas. En definitiva seguiré leyendo y comentando. Iba a dejarte un comentario-ensayo-monólogo interior larguísimo en tu post más nuevo sobre tener al padre en la sala del parto y mi pestaña falló, borrándolo todo. Será después.

    Este es mi primer embarazo y aunque no sé nada de nada de nada de estas cosas no he sentido mucha necesidad de comprar libros. Eso sí, en estos días vi un manual de cuidados médicos y primeros auxilios para bebés y niños... creo que me llama porque me tocó a mi nerviosa interior y porque me parece que es uno de esos temas sobre los cuales no se habla comunmente.

    Definitivamente buscaré el de Pantley.

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  2. Hola, Cari, gracias por comentar! Cuando yo estaba embarazada de Dani me la pasaba leyendo, aunque hay que tener cuidado de no saturarse. Se aprende mucho más sobre la marcha que con los libros. Lo de primeros auxilios parece interesante, tengo pendiente hacer un curso. Y el de Pantley no sé si se consigue fácilmente en las librerías, pero seguramente lo podés encontrar online.

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